miércoles, 5 de diciembre de 2007

El fallo de la Suprema Corte de Justicia de la Nación sobre la violación a derechos humanos de Lydia Cacho

"¡Simplemente no lo aceptamos!"

Las Organizaciones que formamos parte de la Campaña Contra la Explotación Sexual Infantil "¡Simplemente no lo aceptamos!" entregaremos a la SCJN firmas en repudio por la decisión de avalar la impunidad y la corrupción de Mario Marín y de la red de explotación sexual comercial infantil.

La cita es el próximo jueves 6 de diciembre a las 12 horas

frente a la Suprema Corte de Justicia de la Nación

Pino Suárez # 2 Col. Centro.

¡Los esperamos!



Carlos Alberto Zetina Antonio

Tel. 5590 8754

martes, 27 de noviembre de 2007

ALERTA EL COMITÉ CONCIUDADANO SOBRE MANEJO OPACO DE LA REFORMA ELECTORAL

  • El CCRE denuncia falta de transparencia en la reforma a las leyes secundarias
  • Se percibe la intención de los partidos políticos por controlar a la autoridad electoral y limitar su autonomía
  • Advierte el riesgo de omitir temas indispensables para concretar la reforma electoral.
  • Es necesario fortalecer a los consejos locales y distritales
  • Es preciso proteger a los programas sociales de cualquier intento de uso con fines electorales.

El Comité Conciudadano para la Reforma Electoral (CCRE) expresa preocupación por la manera en la que se ha venido llevando a cabo la reforma a las leyes secundarias en materia electoral, una vez publicada la reforma constitucional en el Diario Oficial, el pasado 14 noviembre.

El Comité rechaza tajantemente la opacidad en estos procedimientos que deberían de llevarse a cabo de cara a la ciudadanía y con su participación, dando a conocer los avances en la redacción de las leyes secundarias, en especial del COFIPE.

Las discusiones en el seno de la Comisión Ejecutiva de Negociación y Construcción de Acuerdos (CENCA) se llevan a cabo con documentos que se han hecho del conocimiento de sus integrantes con muy poca anticipación y sobre los cuales se formulan observaciones por escrito, sin discutir ni ventilar los argumentos de cada una de las fuerzas políticas. En esta reforma deberían participar todos los grupos parlamentarios y la ciudadanía.

Esta opacidad propicia que solamente algunas personas y grupos de interés con acceso a los congresistas y representantes de los partidos políticos que realmente están diseñando la reforma, intervengan en el proceso de cambios legales y en la selección de los nuevos integrantes del Consejo General, para promover sus intereses personales y de grupo.

No existe certeza de que los documentos que se presentan a la comisión respectiva del CENCA donde participan representantes de los ocho partidos en el Congreso, sean los documentos que efectivamente está revisando el grupo de nueve representantes de los tres partidos grandes que acordaron la Reforma Constitucional en materia electoral.

De lo poco que se ha podido conocer sobre las propuestas de reforma a las leyes secundarias, el Comité Conciudadano encuentra preocupante la pretensión de modificar el funcionamiento colegiado y democrático del Consejo General del IFE, así como el intento de que los partidos políticos tengan una mayor intervención en la vida y decisiones del Instituto, lo que se suma a la designación de la contraloría del Instituto por el Congreso, a la creación de la Unidad Técnica de Fiscalización y a la desaparición de la comisión respectiva del Consejo General.

El Comité considera que para lograr confiabilidad en la autoridad electoral, la tendencia debería ser el fortalecimiento de las facultades de los consejos locales y distritales, que es en realidad donde la elección se organiza y decide. Ejemplo de ello debe ser el otorgar facultades investigación y sanción a esos órganos, además de darles el carácter de permanencia, por lo menos de manera parcial.

Los consejos locales y distritales deben tener facultades, como órganos ciudadanos de dirección, de sancionar las conductas indebidas de los miembros del Servicio Profesional.

Si los legisladores no fortalecen las instancias de ciudadanas, la legitimidad misma de la reforma estará en riesgo y en ella se privilegiarán los intereses de los partidos y no la necesidad de contar con autoridades electorales más eficientes y confiables.

En cambio, en las reformas propuestas, el Comité detecta una clara intención de los partidos políticos por crear una estructura de acuerdo a sus necesidades de control, asignando a la nueva contraloría del IFE atribuciones y recursos que socavan sustancialmente la autonomía de la autoridad electoral, al pretender asignar al contralor funciones de vigilancia no sólo sobre el ejercicio de recursos sino de conductas y decisiones de los consejeros en el ejercicio de sus atribuciones. Resulta un precedente inaceptable que en el recientemente aprobado Presupuesto de Egresos se hayan etiquetado 100 millones de pesos para la Contraloría del IFE, lo cual vulnera la autonomía de un órgano de Estado. Con ello se asignan recursos para crear una estructura paralela en todo el país, que no esté bajo el control de los órganos ciudadanizados.

Las reformas al COFIPE son omisas respecto de prácticas de simulación que propicia la evaluación del servicio profesional electoral y no atiende a las grandes disparidades en retribuciones entre el Consejo General y sus asesores, la Secretaría y Direcciones Ejecutivas respecto de los consejos y vocalías locales y distritales y del personal administrativo y de campo.

La reforma propuesta no considera cambios indispensables en la estructura y organización del Instituto, que tomen en cuenta los aprendizajes sobre su funcionamiento a lo largo de más de diez años, tales como la fusión de las áreas de capacitación y organización electoral y el fortalecimiento del área de educación cívica.

Con relación al proceso de selección del Consejero Presidente y dos de los Consejeros Electorales, el Comité Conciudadano exhorta a los legisladores a que garanticen el contenido de la reforma constitucional que aprobaron en días pasados haciendo una amplia y efectiva consulta a la sociedad y no únicamente un procedimiento de simulación. Solicitamos que se transparenten y se hagan públicos los perfiles de los aspirantes, se someta a éstos al escrutinio público y se expresen con toda claridad los criterios de selección que las y los legisladores aplicarán en esta designación. Si no se lleva a cabo un genuino proceso de selección, se pondrán en entredicho otros avances alcanzados con la reforma constitucional.

El Comité Conciudadano demanda que se legisle en temas fundamentales para lograr procesos electorales más confiables, equitativos y eficientes. Destacan los siguientes aspectos:

  1. La protección de los programas sociales. Es preciso regular la publicidad acerca de estos programas para evitar su uso con fines electorales y sancionar oportuna y contundentemente a los servidores públicos que los utilicen en forma facciosa. También es preciso hacer accesible la denuncia colectiva
  2. La garantía de aleatoriedad para la selección de ciudadanos que se desempeñarán como funcionarios de casilla; es indispensable asegurar asimismo que su capacitación sea de calidad para que puedan desempeñar mejor sus labores durante la jornada electoral.
  3. El urgente y necesario el fortalecimiento de los Consejos Locales y Distritales del Instituto Federal Electoral para hacer efectivas sus facultades de vigilancia y supervisión de todas las etapas de los procesos electorales.
  4. El establecimiento en el COFIPE de un fondo para la observación electoral que pueda aplicarse a proyectos de observación a lo largo de cada proceso electoral y no sólo de las últimas etapas.
  5. La fusión de las direcciones y vocalías ejecutivas de capacitación y de organización electoral para hacer más efectivo y eficiente el trabajo durante las elecciones.
  6. La realización de las adecuaciones necesarias al Libro Sexto del COFIPE para hacer eficaz y reducir los costos que implica la organización del voto de los mexicanos en el extranjero.
  7. La garantía de un sistema de justicia electoral más accesible a los ciudadanos y que proteja de manera efectiva sus derechos político electorales.
  8. La protección efectiva de la intimidad de los ciudadanos frente al abuso de los nuevos medios de información y de la publicidad exterior con fines de propaganda electoral.

El Comité Conciudadano para la Reforma Electoral insiste en que la confianza en las elecciones sólo se recuperará si se privilegia la protección de los derechos político-electorales de los ciudadanos, por encima de los intereses de los partidos, de grupos y personas con acceso a las cúpulas de poder.

John Ackerman, Sergio Aguayo Quezada, Hugo Almada, Jorge Alonso Sánchez, Silvia Alonso, Rubén Alonso, Ivabelle Arroyo, Alberto Aziz Nassif, Miguel Basáñez, José Bautista, Kristian Bernal, Miguel Bazdrech, Roy Campos, Jesús Cantú, Augusto Chacón, Miguel Concha Malo, José Antonio Crespo, Eréndira CruzVillegas, Oscar de los Reyes, Denise Dresser, Yolanda Elías Calles, Alfredo Figueroa, María Fernanda Gálvez, Rogelio Gómez Hermosillo, Daniela Griego, Octavio Hernández Lara, Ernesto Isunza, Francisca Jiménez, Clara Jusidman, Flavio Lazos, Marcos Leyva, Juan José López, Cristina Martin, María Isabel Martínez Rocha, Irma Rosa Martínez, Alberto Olvera, Joaquín Osorio, Carlos Pérez, Jaime Preciado, Rosa María Rubalcava, Ana Saiz, Gabriel Sánchez, Irma Eréndira Sandoval, Rodrigo Salazar, Isabel Sepúlveda, Brisa Solís, Enrique Valencia, Elio Villaseñor.

Academia Morelense de Derechos Humanos, A. C.

Alianza Cívica, A.C.

CENCOS

Consorcio para el Diálogo Parlamentario y la Equidad, A.C.

Educa - Oaxaca A.C

Incide Social, A.C.

Matraca, A.C.,

No Grupo de Jalisco

Presencia Ciudadana Mexicana, A.C.

Red por la Participación Ciudadana, A.C.

www.comiteconciudadano.blogspot.com

contacto de prensa: Sergio Leñero 5533-6475 y 76

jueves, 22 de noviembre de 2007

Convocatoria para seleccionar al Consejero Presidente y a dos consejeros electorales

El 20 de noviembre pasado se aprobó por el pleno de la Cámara de Diputados la convocatoria a los ciudadanos que reúnan los requisitos constitucionales y legales, propuestos por grupos de ciudadanos, organizaciones ciudadanas debidamente constituidas o por sí mismos, al proceso de selección de candidatos a ocupar los cargos de Consejero Presidente y Consejeros Electorales del Consejo General del Instituto Federal Electoral y el procedimiento bajo el cual se llevará a cabo la selección.


Vínculo hacia la Página de la Cámara de Diputados para consultar la Convocatoria y los formatos necesarios para participar.

miércoles, 17 de octubre de 2007

PROPONE EL COMITÉ CONCIUDADANO PERFIL PARA LOS CONSEJEROS ELECTORALES Y EL PROCEDIMIENTO PARA SU ELECCIÓN

  • También plantea los aspectos centrales de lo que debe ser la legislación secundaria en materia electoral
  • El CCRE propone un procedimiento transparente y abierto en todas y cada una de sus etapas
  • La o el Consejero Presidente del IFE deberá tener experiencia administrativa, académica u organizativa probada de por lo menos diez años en materias electorales, de partidos, educación cívica o participación ciudadana
  • La o los consejeros deberán contar con reconocimiento público de su trayectoria académica, profesional o civil a nivel nacional o regional
  • Deberán ser reconocidos por una conducta austera y responsable en el manejo de recursos públicos
  • No podrán ser candidatos los miembros del servicio profesional electoral, ni quien haya sido secretario ejecutivo o director ejecutivo en los cinco años anteriores
  • Tampoco podrán aspirar al cargo quienes hayan militado en partido político alguno en los últimos cinco años
  • La equidad de género debe ser un principio en la conformación de los órganos electorales
  • Es indispensable proteger los espacios de decisión de las autoridades ciudadanas dentro del IFE y fortalecer los consejos locales y distritales
  • El COFIPE requiere un capítulo sobre protección de programas sociales para que no sean empleados con fines electorales
  • El CCRE reitera que es preciso hacer accesible el sistema de justicia electoral a los ciudadanos

El Comité Conciudadano para la Reforma Electoral (CCRE) propone una modificación sustancial al perfil y a los requisitos que establece la ley para ser Consejera (o) Presidente y/o Consejera (o) Electoral del Instituto Federal Electoral. Se requiere de un perfil que se apegue a los principios rectores del Instituto Federal Electoral y a valores democráticos como la tolerancia, el respeto, la no discriminación, la transparencia y la rendición de cuentas.

Considera que la o el Consejero Presidente deberá contar con experiencia administrativa, académica u organizativa probada de por lo menos diez años en materias como legislación electoral y/o procesos electorales y/o partidos y organizaciones políticas y/o administración de procesos complejos o de organización de participación masiva y/o educación cívica y fomento y/o análisis de cultura democrática;

También es necesario que haya ocupado cargos de alta responsabilidad durante su experiencia profesional y que cuente con capacidades probadas para diálogo, resolución de situaciones críticas, diseño estratégico y comunicación pública.

En cuanto a los requisitos legales para las y los consejeros electorales, el CCRE solicita al Congreso de la Unión que sea un requisito no haber militado en partido político alguno en los últimos cinco años.

Estima necesario que se incluya como requisito legal no haber sido miembro del servicio profesional electoral, ni secretario (a) ejecutivo, ni director (a) ejecutivo de organismo electoral alguno en los cinco años anteriores a su designación.

El Comité considera indispensable que las y los Consejeros Electorales cuenten con reconocimiento público de su trayectoria académica, profesional o civil a nivel nacional o regional; incluyendo una trayectoria ética probada.

En cuanto al procedimiento para elegirlos, el Comité Conciudadano propone que se incluya en la ley un procedimiento efectivo, abierto y transparente en cada una de sus etapas para realizar la “amplia consulta a la sociedad” que, de acuerdo con la reforma constitucional, deberá realizarse para que los grupos parlamentarios propongan a la Cámara de Diputados candidatos a ocupar los puestos vacantes en el Consejo General del IFE.

El CCRE considera que la Cámara de Diputados deberá emitir una convocatoria pública única, ampliamente difundida, con al menos 60 días de anticipación a la fecha de elección de las y los consejeros. Sugiere un plazo de quince días para la presentación de candidatos y candidatas por parte de organizaciones de la sociedad civil, colegios profesionales, así como instituciones académicas.

Una vez recibidas las propuestas de candidatos y candidatas, la Cámara de Diputados deberá hacer pública la lista de todos ellos y procederá a verificar el cumplimiento de los requisitos que establecen la ley y la Constitución.

Después de la verificación del cumplimiento de requisitos, la Cámara de Diputados publicará la lista de aspirantes. El CCRE propone que se forme una Comisión multipartidista para realizar una segunda calificación de candidatos y así depurar la lista mediante entrevistas “de verificación de información”. También deberá hacer pública la lista de los aspirantes que se mantengan después de esta etapa.

Una vez realizado lo anterior, el Comité recomienda que la Cámara de Diputados abra un periodo de diez días para que cualquier ciudadano o ciudadana de modo fundado y motivado, señale objeciones del no cumplimiento de alguno o algunos de los requisitos previstos en la Ley; el órgano legislativo deberá dar vista al señalado o señalada para que manifieste lo que a su derecho convenga.

De la lista de aspirantes que pasen las tres etapas anteriores, cada grupo parlamentario seleccionará dos candidatos por cada posición vacante de consejero y hará públicas las razones y el mecanismo utilizado para llegar a sus propuestas. Los legisladores podrán realizar entrevistas a los postulantes para seleccionar. En este proceso deberá participar todo el grupo parlamentario.

El CCRE solicita que los candidatos resultantes de las postulaciones de cada fracción parlamentaria se den a conocer públicamente.

La Comisión multipartidista deberá realizar entrevistas a profundidad de manera pública a los aspirantes seleccionados

Los candidatos y candidatas que superen las etapas mencionadas deberán ser sometidos a la votación de la Cámara de Diputados, y serán elegidos con el voto de las dos terceras partes de la Cámara.

Por esta única ocasión, el Comité Conciudadano pide al Congreso de la Unión compactar proporcionalmente los tiempos propuestos para cumplir con el plazo de 30 días que se estableció en los transitorios de la reforma constitucional para llenar las vacantes que se generarán en el Consejo General del IFE.

Para el CCRE es indispensable que la ley adopte las recomendaciones de la Oficina en México del Alto Comisionado de Derechos Humanos para incorporar a mujeres como consejeras en todos los niveles extendiendo la equidad de género en la integración de los órganos electorales, desde los funcionarios de casilla, hasta la conformación del Tribunal Federal Electoral.

También considera necesario asignar recursos para la capacitación política y el empoderamiento de las mujeres dentro de los partidos, e incorporar en el COFIPE y en los códigos electorales locales una cuota para la representación de mujeres indígenas y promover la inclusión de la cuota de género en todos los códigos electorales.

La equidad de género y la incorporación de la diversidad social en la constitución de los consejos ciudadanos de los órganos electorales y en las candidaturas de los partidos, es un tema que deberá incorporarse con toda claridad en la reforma legislativa.

Por otro lado, el CCRE manifiesta su preocupación porque se mantengan e incluso fortalezcan en las leyes secundarias las instancias ciudadanas dentro del Instituto Federal Electoral por ser pieza clave de la confianza que esta institución genera en la sociedad civil.

El Comité Conciudadano considera indispensable que tanto el Consejo General, como los Consejos Locales y Distritales del IFE, cuenten con mecanismos deliberativos efectivos para poder tomar decisiones. Por lo tanto, subraya que las comisiones permanentes de consejeros son indispensables para el adecuado funcionamiento del IFE, en especial en temas como organización y capacitación electoral, fiscalización, registro federal de electores y servicio profesional electoral.

Para el CCRE es necesaria una presencia permanente de Consejeros Electorales en los niveles locales y distritales previendo su sustitución escalonada periódica, con la finalidad de involucrarse en los trabajos de educación cívica, evaluaciones al servicio profesional y correcciones a las etapas y procedimientos tanto en proceso electoral como en las transcurren entre procesos. La presencia de los consejeros en los estados y distritos del país no debe darse únicamente durante los procesos electorales, como se realiza actualmente, sino también en las actividades cotidianas del IFE. Resulta indispensable dotarlos de condiciones que les permitan involucrarse y conocer mejor el trabajo cotidiano del IFE y vigilar situaciones que pudieran afectar la calidad de los procesos electorales en épocas no electorales.

Muchas de las nuevas tareas del IFE habrán de suponer un trabajo permanente de los órganos ciudadanos locales y distritales, que permita ofrecer garantías y estabilidad democrática por periodos prolongados. Asimismo, su presencia permanente facilitaría la organización de elecciones locales cuando así lo acuerden las autoridades estatales con el IFE.

Resulta necesario que se establezca en la ley un procedimiento efectivo y ágil de aplicación de sanciones que garantice el cumplimiento de las nuevas prohibiciones establecidas en la Constitución. Los Consejos del IFE deben tener las facultades necesarias para imponer sanciones por la violación a disposiciones electorales a personas físicas o morales, nacionales y/o extranjeras y/o funcionarios públicos que infrinjan las leyes electorales.

Otro tema prioritario para el Comité Conciudadano es incorporar en el COFIPE y otras leyes las previsiones necesarias para proteger los programas sociales de su probable uso con propósitos electorales y de proselitismo. Esta protección deberá extenderse tanto a los programas federales, como a los estatales y municipales y definir los delitos en que se incurra y las sanciones que ameritan.

Para el Comité Conciudadano es inaceptable que los programas para el desarrollo social se conviertan en mecanismos de promoción electoral de funcionarios y agentes locales o de los gobiernos que los llevan a cabo, situación que ocurre en gobiernos de todos los partidos. Resulta moralmente inaceptable el condicionamiento o la presión a los titulares de estos beneficios con fines electorales. El Comité hace un llamado a los legisladores para que se incorporen en la ley las recomendaciones que al respecto derivaron de los trabajos del Alto Consejo para la Protección de los Programas Sociales del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo en México en 2006.

Un tema prioritario para el Comité Conciudadano es hacer más accesible el sistema de justicia electoral para dar efectiva protección a los derechos políticos de ciudadanos. Para ello, se ha elaborado una propuesta detallada que se basa en la oralización de los procedimientos para hacerlos más sencillos y rápidos.

Para el CCRE resulta indispensable que los nombramientos de los magistrados de la Sala Superior del Tribunal Federal Electoral se lleven a cabo con procedimientos transparentes y de cara a los ciudadanos. Ello con relación a los magistrados que serán sustituidos al implementarse el escalonamiento que ahora exige la reforma constitucional.

El Comité considera que las propuestas para ocupar los cargos de magistrados deben surgir de la Suprema Corte de Justicia, de instituciones académicas y de las organizaciones de la sociedad civil. Los aspirantes deberán contar con una sólida experiencia académica y profesional en derecho público.

Para el Comité Conciudadano es muy importante que las causales específicas para la nulidad de una elección que se incluyan en la ley sean las necesarias para evitar efectivamente la intervención de actores externos o de poderes fácticos en los procesos electorales. Asimismo considera necesario que se recoja en la ley la obligatoriedad para realizar recuentos en elecciones cerradas para tener una certeza absoluta de los resultados.

Se debe reconocer al ciudadano el interés legítimo en el sistema de justicia para combatir los actos jurídico-electorales que desde su punto de vista, vulneren el marco constitucional y legal que regula las elecciones en México. Considera importante que cualquier ciudadano pueda combatir los actos emitidos por los órganos de los partidos políticos o del IFE que en su opinión vulneren sus derechos a votar o ser votado.

Igualmente necesario resulta que la Fiscalía Especializada para la Atención de los Delitos Electorales cuente con autonomía respecto del Poder Ejecutivo y con mejores instrumentos legales para cumplir de manera efectiva con sus obligaciones como son la redefinición de los delitos electorales en el Código Penal, la inclusión de los mismos en la Ley Federal contra la Delincuencia Organizada y una capacidad real para recoger las denuncias en todo el territorio nacional.

El Comité Conciudadano manifiesta su interés por trabajar con las diferentes fuerzas políticas para defender los derechos de las y los ciudadanos como eje de la reforma electoral, y reitera la exigencia para que el Congreso de la Unión establezca diálogo con la sociedad civil y escuche las voces de ciudadanos y ciudadanas independientes de los partidos políticos, en este proceso de reforma electoral.

John Ackerman, Sergio Aguayo Quezada, Hugo Almada, Jorge Alonso Sánchez, Silvia Alonso, Rubén Alonso, Ivabelle Arroyo, Alberto Aziz Nassif, Miguel Basáñez, José Bautista, Miguel Bazdrech, Kristian Bernal, Roy Campos, Jesús Cantú, Augusto Chacón, Miguel Concha Malo, José Antonio Crespo, Eréndira CruzVillegas, Oscar de los Reyes, Denise Dresser, Yolanda Elías Calles, Alfredo Figueroa, María Fernanda Gálvez, Rogelio Gómez Hermosillo, Daniela Griego, Octavio Hernández Lara, Ernesto Isunza, Francisca Jiménez, Clara Jusidman, Flavio Lazos, Marcos Leyva, Juan José López, Cristina Martin, María Isabel Martínez Rocha, Irma Rosa Martínez, Alberto Olvera, Joaquín Osorio, Carlos Pérez, Jaime Preciado, Rosa María Rubalcava, Ana Saiz, Gabriel Sánchez, Irma Eréndira Sandoval, Rodrigo Salazar, Isabel Sepúlveda, Brisa Solís, Enrique Valencia, Elio Villaseñor.

Nuestras propuestas se pueden consultar en la siguiente dirección electrónica: www.comiteconciudadano.blogspot.com

Contacto de prensa: Sergio Leñero Tels. 5533-6475 y 76

comiteconciudadano@gmail.com



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martes, 2 de octubre de 2007

El Organismo Electoral Mexicano y sus Transformaciones, por Jorge Alonso



Este trabajo hace un recorrido por las diversas modalidades que ha tenido el organismo encargado de organizar las elecciones después de la Revolución Mexicana. Se presentan los problemas del Instituto Federal Electoral responsable de las elecciones presidenciales de 2006, sus cuestionamientos y las diversas posiciones en torno a una nueva reforma electoral y remoción del Consejo General del IFE.

Jorge Alonso es Doctor en Antropología, Investigador en el CIESAS, Consejero Local del IFE en Jalisco.

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viernes, 21 de septiembre de 2007

Pronunciamiento

Rechazo a las presiones de los empresarios

de la radio y televisión

Avancemos en la reforma electoral y en la de medios de comunicación

Ciudadanas, ciudadanos y organizaciones civiles

A la Opinión Pública:

· Reconocemos los avances en la reforma electoral para cambiar la relación entre medios, dinero y partidos.
· Rechazamos las campañas agresivas y difamatorias de las empresas de radio y televisión en contra del Congreso.
· Proponemos profundizar las reformas en materia electoral y de radio, televisión y telecomunicaciones para avanzar en la democracia.
· Pugnamos por un nuevo modelo de relación y comunicación entre los poderes constitucionales y la ciudadanía.
Un grupo de ciudadanos y ciudadanas y sus organizaciones, reconocemos que en los recientes cambios constitucionales aprobados por el Congreso en materia electoral, existen avances importantes para evitar el desproporcionado gasto en publicidad de las campañas electorales.
Consideramos un acierto la decisión de que la difusión de las campañas se realice sólo en los tiempos oficiales, que se prohíba la compra por terceros de tiempos para campañas políticas y se legisle para despersonalizar la publicidad que realizan los funcionarios y servidores públicos con recursos del presupuesto.
La reforma electoral propuesta contiene un nuevo modelo de relación entre los partidos políticos y los medios de comunicación electrónicos. El punto fundamental de esta reforma, es la prohibición total para adquirir tiempo en radio y televisión para fines de propaganda electoral. Esta prohibición no afecta la libertad de expresión, ya que esa libertad no depende de comprar espacios en los medios de comunicación, ni se garantiza por no comprarlos.
El reto en materia de libertad de expresión, consiste en generar las condiciones de acceso y las garantías para la participación en los medios de comunicación de las diversas voces y los diferentes actores políticos y sociales, el apoyo al florecimiento de radios comunitarias y de medios públicos y la transparencia y equidad en el otorgamiento de concesiones, situaciones actualmente deficitaria por la elevada concentración de las concesiones de radio y televisión.
Nos preocupa y no estamos de acuerdo con la campaña de descalificación al trabajo del Congreso, desatada por los empresarios de la radio y la televisión. Se trata de una campaña que falta a la verdad, que alienta el conflicto, que pretende generar temor, que poco contribuye a la creación de espacios de diálogo para avanzar en la democracia y en nada ayuda a generar confianza.
Reconocemos que los cambios constitucionales en materia electoral y la necesidad de modificar la legislación en materia de radio y televisión ofrecen en la legislación secundaria una oportunidad para profundizar la Reforma del Estado en estas materias y quisiéramos que en ella se incluyeran disposiciones precisas y contundentes sobre:
· La participación ciudadana en el proceso de selección de las y los nuevos consejeros electorales, de los o las responsables de la contraloría del IFE y del órgano de fiscalización de los partidos, de las y los magistrados del Tribunal Electoral y de la Fiscalía Especializada en Delitos Electorales, a efecto de salvaguardar el carácter ciudadano y la autonomía de las autoridades electorales,
· La participación equitativa y paritaria entre hombres y mujeres,
· La reducción al 50% de los gastos en materia electoral, tanto por una disminución real a los presupuestos de los partidos como por cambios en la organización y administración de las instituciones que ejercen la autoridad electoral.
· El sujetar a los partidos políticos a la Ley Federal de Transparencia y Acceso a al Información.
· El hacer más accesible la justicia electoral a los ciudadanos y a los militantes de los partidos.
· El avanzar en la democratización del acceso a concesiones y permisos en los medios de comunicación electrónica
Los y las firmantes quisiéramos encontrar en el Poder Legislativo - uno de los tres poderes constitucionales- un compromiso con la participación, el diálogo y la construcción de consensos entre la diversidad y pluralidad de actores sociales, políticos y económicos, con miras al fortalecimiento de la democracia mexicana.
Organizaciones
Comité Conciudadano para la Reforma Electoral,
Mesa Ciudadana de Medios
Asociación Mundial de Radios Comunitarias México, Artículo 19 Sección México, Incide Social A.C., Centro Nacional de Comunicación Social A.C., Asociación Nacional de Abogados Democráticos, Comunicación Comunitaria A.C., Comunicación e Información para la Mujer A.C. CIMAC, Servicios para la Educación Alternativa - EDUCA-Oaxaca, Fomento Cultural y Educativo A.C., Alianza Cívica A.C., Infancia Común A.C., Red por los Derechos de la Infancia en México, Presencia Ciudadana Mexicana A.C., Ciudadanos en Apoyo a los Derechos Humanos A.C. Enlace y Comunicación A.C., Red por la Participación Ciudadana A.C. (Chihuahua), Asociación de Abogadas Chihuahuenses A.C, Enlace y Comunicación A.C, Chan Tza Can S.S.S. (Yucatán), Coorindación Nacional de Mujeres de Organizaciones Civiles "Por un Milenio Feminista", CEP- Parras (Coahuila), Asistencia Legal por los Derechos Humanos A.C. (ASILEGAL), DECA Equipo Pueblo A.C., Servicios para la Paz A.C. SERAPAZ, Academia Mexicana de Derechos Humanos, Cátedra UNESCO de la UNAM, Comisión Ciudadana de Derechos Humanos del Noroeste, A.C. (Mexicali, BC), Centro de Desarrollo Humano y Comunitario, A. C., Desarrollo Comunitario y Cultural Ma nguhe, A. C., Revista Zócalo, Revista La Guillotina, Revista Generación, Consorcio para el Diálogo Parlamentario y la Equidad, La Forja - Tasqueña, Frente Cívico Taxco, Comité Ciudadano de Ixtapan de la Sal, Red Ciudadana de Puebla, Asociación Nacional de Empresas Comercializadoras de Productores del Campo (ANEC) , ADIVAC, Promoción de Servicios de Salud y Educación Popular, A. C. (PRODUSSEP), Cauce Ciudadano A.C , Comité Cerezo México, Dinamismo Juvenil A.C., Alianza Cívica - Chiapas (Chiapas), Católicas por el Derechos a Decidir A.C., Centro de Atención a la Mujer A.C. Chihuahua (Chihuahua) Centro de Economía Social Julián Garcés, A.C. (Tlaxcala), Empresarios de los Medios de Comunicación, Fundación Vision Mexico 2020 A.C.Red Nacional de Organismos Civiles de Derechos Humanos:"Todos los Derechos para Todos y Todas": Acción de los Cristianos para la Abolición de la Tortura, A. C. (Distrito Federal), Asistencia Legal por los Derechos Humanos, A.C. (Distrito Federal), Asociación Jalisciense de Apoyo a los Grupos Indígenas, A.C. (Guadalajara, Jalisco), Asociación para la Defensa de los Derechos Ciudadanos "Miguel Hidalgo", A.C.(Jacala, Hidalgo.), Católicas por el Derecho a Decidir, A.C. (Distrito Federal), Centro de Derechos Humanos Fray Francisco de Vitoria, Centro "Fray Julián Garcés" Derechos Humanos y Desarrollo Local, A. C. (Tlaxcala, Tlaxcala.), Centro de Apoyo al Trabajador, A.C. (Puebla, Pue.), Centro de Derechos Humanos "Fray Bartolomé de Las Casas", A. C. (San Cristóbal de Las Casas, Chiapas), Centro de Derechos Humanos "Fray Francisco de Vitoria O.P.", A. C. (CDHFV)(Distrito Federal), Centro de Derechos Humanos "Miguel Agustín Pro Juárez", A. C. (PRODH)(Distrito Federal) Centro de Derechos Humanos "Don Sergio" (Jiutepec, Morelos),Centro de Derechos Humanos "Fray Matías de Córdova". A.C. (Tapachula,Chiapas), Centro de Derechos Humanos de la Montaña, Tlachinollan, A. C. (Tlapa, Gro.), Centro de Derechos Humanos Ñu'u Ji Kandií, A. C. (Tlaxiaco, Oax.), Centro de Derechos Humanos Solidaridad Popular, A.C. (Monterrey, N.L.), Centro de Derechos Humanos Tepeyac del Istmo de Tehuantepec, A. C., (Tehuantepec, Oax), Centro de Derechos Humanos Victoria Diez, A.C. (León, Guanajuato.), Centro de Derechos Indígenas "Flor y Canto", A. C. (Oaxaca, Oaxaca.), Centro de Derechos Indígenas A. C. (Bachajón, Chiapas), Centro de Estudios Fronterizos y Promoción de los Derechos Humanos, A. C.(Reynosa, Tamaulipas.), Centro de Reflexión y Acción Laboral (CEREAL-DF) (Distrito Federal), Centro de Reflexión y Acción Laboral (CEREAL-Guadalajara) (Guadalajara, Jalisco), Centro Diocesano para los Derechos Humanos "Fray Juan de Larios", A.C. (Saltillo, Coahuila), Centro Regional de Defensa de DDHH José María Morelos y Pavón, A. C. (Chilapa, Guerrero), Centro Regional de Derechos Humanos "Bartolomé Carrasco", A. C. (Oaxaca, Oaxaca), Ciencia Social Alternativa, A.C. - KOOKAY (Mérida, Yucatán), Ciudadanía Lagunera por los Derechos Humanos, A. C. (CILADHAC) (Torreón, Coahuila), Ciudadanos en Apoyo a los Derechos Humanos, A. C. (CADHAC) (Monterrey, Nuevo León), Colectivo Educación para la Paz y los Derechos Humanos, A.C., (CEPAZDH) (San Cristóbal de Las Casas, Chiapas),Comisión de Derechos Humanos "La Voz de los sin voz" (Cayuca de Benítez, Guerrero.), Comisión de Derechos Humanos y Laborales del Valle de Tehuacan, A.C. (Tehuacan, Puebla.), Comisión de Solidaridad y Defensa de los Derechos Humanos, A. C. (Chihuahua, Chihuahua.), Comisión Independiente de Derechos Humanos de Morelos, A. C. (CIDHMOR) (Cuernavaca, Morelos),Comisión Intercongregacional "Justicia, Paz y Vida" (Distrito Federal), Comisión Parroquial de Derechos Humanos "Martín de Tours", A.C. (Texmelucan, Puebla), Comisión Regional de Derechos Humanos "Mahatma Gandhi", A. C. (Tuxtepec, Oaxaca.), Comité de Defensa de las Libertades Indígenas (CDLI), (Palenque, Chiapas), Comité de Derechos Humanos Ajusco (Distrito Federal) Comité de Derechos Humanos "Fray Pedro Lorenzo de la Nada", A. C. (Ocosingo, Chiapas.), Comité de Derechos Humanos "Sembrador de la Esperanza". A. C. (Acapulco, Guerrero), Comité de Derechos Humanos "Sierra Norte de Veracruz", AC., (Huayacocotla, Veracruz), Comité de Derechos Humanos de Colima, No gubernamental, A. C. (Colima, Colima.),Comité de Derechos Humanos de Comalcalco, A. C. (CODEHUCO) (Comalcalco, Tabasco), Comité de Derechos Humanos de Tabasco, A. C. (CODEHUTAB) (Villahermosa, Tabasco), Comité de Derechos Humanos y Orientación Miguel Hidalgo, A. C. (Dolores Hidalgo, Guanajuato), Comité Sergio Méndez Arceo Pro Derechos Humanos de Tulancingo, Hgo AC (Tulancingo, Hidalgo), Consorcio para el Diálogo Parlamentario y la Equidad, A.C. Frente Cívico Sinaloense. Secretaría de Derechos Humanos. (Culiacán, Sin.), Foro de Jóvenes con Liderazgo A. C,Infancia Común A.C, Indignación, A. C. Promoción y Defensa de los Derechos Humanos, (Chablekal, comisaría del municipio de Mérida, Yucatán.), Instituto Guerrerense de Derechos Humanos, A. C. (Chilpancingo, Guerrero.), Inglobal A.C., Instituto Mexicano para el Desarrollo Comunitario, A. C. (IMDEC), (Guadalajara, Jalisco), Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente, - Programa Institucional de Derechos Humanos y Paz. (Guadalajara, Jalisco.), Programa de Derechos Humanos. Universidad Iberoamericana-Puebla (Puebla, Puebla), Programa Universitario de Derechos Humanos. UIA –León (León, Guanajuato), Respuesta Alternativa, A. C. Servicio de Derechos Humanos y Desarrollo Comunitario (San Luis Potosí, San Luis Potosí.), Servicio, Paz y Justicia de Tabasco, A.C. (Villahermosa, Tabasco), No Grupo (Jalisco)
Ciudadanos y Ciudadanas
Alma Rosa Alba de la Selva, Sergio Aguayo, Hugo Almada, Jorge Alonso, Silvia Alonso, Miguel Álvarez, John Ackerman, Ana María Argüelles, Juan Carlos Arjona Estévez, Rodrigo Ayala, Alberto Aziz Nassif, Miguel Bazdresch Parada, Laura Becerra, Selma Beraud, Kristian Bernal Moreno , Mario Bladimir Monroy Gómez, Carlota Botey, Laura Breña, Jaime Brito, Norma Bustamante Martínez, Aleída Calleja, Norma Castañeda Bustamante, Oscar Castro Soto, Alfonso Celestino Pérez, Guadalupe Cortes, J. Dionisio B. Cordova Tello, Yolanda Elia Calles, Susana Cruickshank, Carlos Cruz, Federico Campbell, Antonio Castañeda de Luna, Jaime Cuevas Mendoza , Gabriel Delgado, Alejandra Ezeta, Guillermo Fadanelli, Denise Dresser, Alfredo Figueroa, Felipe Fulop, Jesús Cantú, Sergio Cobo, Miguel Concha Malo, Héctor García, Magdalena García, Sergio García, Carlos Martínez Renteria, Karla Gónzalez, Martha Delia González Aguilar, Miriam Gomezcésar, Carolina Grajales Valdespino, Miguel Ángel Granados Chapa, Témoris Grecko Berumen, Aidé García, Paulina Gutiérrez Jiménez, José Luis Gutiérrez Román, Alicia Ibarguengoitia, Cuauhtémoc López, Marusia López, Carlos Heredia, Octavio Hernández Lara, María Teresa Jardí Alonso, Francisca Jiménez, Clara Jusidman, Flavio Lazos, Marcos Leyva Madrid, Sergio López Menédez, María López de la Rica, Irma Rosa Martinez, Paulina Mancebo Padilla, Andrea Márquez, Cristina Martín, José Manjarrez Medina, Rocío Mejía, Oscar Menendez, Delfina Montaño, Consuelo Morales, Maricarmen Morales, Mara Muñoz, Sara Murua, Rosario Novoa Peniche, Josefina Pataky, Miguel Ángel Paz, Carlos Pérez, Enrique Pérez, Ivette Pérez Medina, Laura Elisa Pérez, David Peña Rodríguez, Gerardo Pimentel , Luis Pineda, Felipe Posadas, Raúl Ramírez Baena, Gloria Ramírez, Nashieli Ramírez, Darío Ramírez Salazar, Héctor Ramos Aguilar, Leonel Rivero, Rosa María Ruvalcaba, Ana Saiz, Armando Salgado, Arturo Saucedo, José Guadalupe Sánchez, Gabriel Sánchez Díaz, Miguel Sarre, Irma Eréndira Sandoval, Brisa Solis, Víctor Suárez Carrera, Alma Soto, Maria Vallarta Vázquez, Juan Antonio Vega Báez, Elsa Villalpando, Jenaro Villamil, Alfredo Zepeda, Teresa Zepeda Torres, Carlos Zetina, Verónica Stern, Francisco R. Dávila, Ivabelle Arroyo, Isabel Sepúlveda, Augusto Chacón, Enrique Valencia, Joaquín Osorio, José Bautista, Rubén Alonso, Jaime Preciado.

lunes, 17 de septiembre de 2007

Claves para mirar la reforma electoral, por Alfredo Figueroa


Las últimas semanas hemos vivido con intensidad la discusión en torno a la reforma electoral, que, como parte de la Reforma del Estado, ha venido a terminar con una sequía de más de once años en torno a las posibilidades sustantivas de modificar las reglas de la competencia política en México.

Sobre sus antecedentes y actuales controversias tratan estas líneas, cuyo propósito no es abonar en la construcción de una supremacía teórica o ideológica, entre otras cosas, porque existen buenas razones para afirmar que vivimos una pluralidad de modelos y orientaciones democráticas y porque rechazo la tentación de analizarle con fórmulas ideales del deber ser que se legitiman autoreferencialmente. En realidad, escribo desde la mirada que se construye a partir de la experiencia de quien ha participado en organizaciones civiles, instituciones electorales y ámbitos propiamente académicos, para pensar en el actual contexto los avances y retrocesos que se advierten en las modificaciones constitucionales que ha supuesto la reforma aprobada por el Senado de la República.

Antecedentes de la ciudadanización

La crisis política derivada de las elecciones de 1988 motivó el surgimiento de diversos grupos y organizaciones que pusieron en escena su interés político porque México transitara hacia un régimen democrático; esta postura resultante del fin del modelo de partido único propició también que dentro de las élites políticas se transitara de un discurso nacionalista y revolucionario a uno entonces pretendidamente moderno y democrático. Los acontecimientos sucedidos en el mundo, dividido entre fuerzas aparentemente contradictorias -cuyo símbolo es la caída del Muro de Berlín- situaron a México bajo la exigencia internacional, política y económica, de experimentar transformaciones en estos ámbitos. Nacieron así movimientos ciudadanos cuyo propósito era, entre otras cosas, la observación de procesos electorales y cuya expresión más acabada ocurrió en el proceso electoral del 21 de agosto de 1994.

La demanda sustantiva de aquellos grupos era la búsqueda de autonomía e independencia, que podía ser garantizada sólo a merced de la ciudadanización de los órganos electorales. El nacimiento del Instituto Federal Electoral fue producto, entre muchos otros factores, de identificar confianza institucional, legalidad y legitimidad democrática con grado de ciudadanización. La ciudadanización de los organismos electorales locales y federales fue y sigue siendo un proceso lento y dispar a lo largo del país, pero al menos desde su dimensión discursiva, tanto quienes se organizaban para hacer que México transitara a un régimen democrático, como aquellos que gobernaban producto de un sistema no democrático, asumieron el término de ciudadanización y un debate en torno a su contenido como una fuente de legitimidad pública y política. No debe pues identificarse ciudadanización con un movimiento generalizado de la sociedad mexicana, sino como un movimiento que incorporó actores políticos gubernamentales y no gubernamentales en el proceso de transformación democrática.

A partir de la reforma de 1996 se diseñó una institución que tuviese esencialmente dos grandes dimensiones: órganos directivos conformados por ciudadanos con independencia política de los partidos y del gobierno, y un órgano ejecutivo heredado del viejo régimen, cuya promesa de cambio estaba ligada a un proceso de profesionalización de servidores públicos.

El trasfondo del diseño aludido en torno al IFE, nace de la desconfianza que, por buenas razones, se tenía en la organización de las elecciones; así, buena parte de las prácticas institucionales que se desarrollaron tuvieron como eje la construcción de candados que impidiesen la manipulación de los resultados electorales: un padrón electoral con fotografía, estrategias de capacitación electoral que privilegiasen el azar en la selección de funcionarios de casilla, determinaciones electorales administrativas revisadas por ámbitos jurisdiccionales construidos para este propósito, y boletas electorales llenas de mecanismos que impidiesen su falsificación, entre muchos otros.

En la reforma de 1996 se produjo un consenso político entre intereses antagónicos que supuso, de tal modo, una institución electoral constitutivamente antagónica. El IFE fue la síntesis de contradicciones políticas, pero también una manera de procesarlas y resolverlas.

Cuando hablamos de una reforma electoral de tercera generación, de cara a la actual discusión, tenemos que ubicar la primera generación en el surgimiento del IFE en 1990 y la segunda en la aludida reforma de 1996, ambas enmarcadas por el nacimiento de la ciudadanización y la autonomía como fuentes del desarrollo institucional.

2007, el año de la reforma

Hasta ahora conocemos las modificaciones expresadas en una reforma electoral sólo a nivel constitucional. Desde las reformas hechas por el Senado a nueve artículos de la Carta Magna, es posible reconocer las orientaciones que la reforma implicará. Debe decirse que se trata apenas del principio, porque falta aún que sea aprobada por la Cámara de Diputados y por la mayoría de las legislaturas locales; y además, porque al estar la Constitución por encima de cualquier otra norma en México, de concretarse los cambios constitucionales deberán modificarse leyes, códigos y muy probablemente crearse nuevos cuerpos normativos y reglamentarios. Sólo entonces la reforma habrá concluido.

Antes de entrar al análisis puntual de los aspectos más relevantes de la reforma, cabe hacer una pregunta en apariencia inocente: ¿por qué existen hoy las condiciones que hacen posible la discusión sobre los grandes temas de reforma electoral en nuestro país? Se puede responder que se trata de unas reglas del juego absolutamente rebasadas por la realidad política y la competencia electoral, que trajo como consecuencia la crisis que las instituciones, el Estado mismo y la sociedad en su conjunto experimentaron en el proceso electoral 2005-2006.

Desde diversos espacios ciudadanos y prácticamente desde la conclusión del proceso electoral del 2000, muchas organizaciones, consejeros electorales locales y distritales, así como diversos trabajos de investigación, documentaron la necesidad de entrar a una discusión profunda en torno a la pertinencia de reformar la legislación en materia electoral, a lo que los partidos políticos, las instituciones del Estado y sus élites, incluido el entonces Consejo General del IFE, ofrecieron por respuesta que: seguramente había que hacer algunas adecuaciones que perfeccionaran una institución que había dado clara muestra de su capacidad para garantizar condiciones democráticas en la competencia política, pero que la alternancia en el poder Ejecutivo Federal, la ausencia de recursos de impugnación de los resultados electorales, e incluso el IFE tomado como modelo internacional en la organización de procesos electorales, producían una evidencia incombatible de su eficacia.

Al margen quedaron argumentos como las evidentes fallas en la estructura del servicio profesional electoral documentadas ampliamente, la intervención de dinero no fiscalizable en los procesos electorales, la presión política ejercida desde los poderes locales contra de las autoridades electorales, y el enorme esfuerzo invisible de muchas ciudadanas y ciudadanos mexicanos, cuya responsabilidad hizo posible los resultados electorales del año 2000, no al amparo de una legislación sólida, sino a pesar de claras insuficiencias en materia reglamentaria y normativa.

Las elecciones intermedias de 2003 y muchas experiencias electorales estatales volvieron a poner en evidencia un sistema electoral rebasado; por si esto fuera poco, los diputados no sólo dejaron intocada la Constitución y el Cofipe, sino que respondieron con el nombramiento de un consejo general que no fue producto de un acuerdo amplio entre las fuerzas políticas, y que, además, bajo el argumento de que el IFE era una institución consolidada, no puso especial énfasis en la experiencia de quienes asumían el cargo del máximo órgano de dirección del Instituto. Las principales fuerzas políticas no advirtieron las consecuencias de su decisión y de su incapacidad por llegar a acuerdos fundamentales para la gobernabilidad.

Aún cuando comparto algunas de las críticas que se formulan en torno al actual consejo general, pienso que las élites de los partidos políticos son, en muchos casos, altamente corresponsables de las deficiencias e insuficiencias que experimentamos en la elección anterior.

Sin esta larga aclaración, es difícil entender una propuesta ciudadana de reforma electoral como la formulada por el Comité Conciudadano y las orientaciones y contrastes que un planteamiento como éste tiene, tanto para quienes están en favor de la reforma, como para aquéllos que la descalifican.

Desde la perspectiva ciudadana

tenemos que celebrar ampliamente que exista siquiera la disposición para discutir un problema acallado y silenciado, porque contra lo que se piense, no ha sido parte importante de la agenda de partidos, gobiernos, medios y otros actores y poderes de facto en México desde hace un periodo importante de tiempo. Esta "democracia" adquirida por declaraciones sucesivas y enfáticas, no nos había dado la posibilidad de discutir con seriedad sus reglas.

La intervención del dinero

El elemento más importante de la reforma electoral está, sin duda, en la regulación de los medios de comunicación y de aquellos que gracias al poder económico pueden acceder a ellos. La prohibición expresa respecto a la intervención indebida de terceros, tanto de carácter público como privado, en la contienda, favoreciendo y perjudicando a los competidores, junto con la prohibición de hacer uso de tiempos comerciales para las campañas electorales, es un logro fundamental para el desarrollo democrático, porque atiende en parte uno de los problemas más importantes que hemos experimentado en los últimos años: el condicionamiento de los poderes públicos por élites económicas.

Dos aspectos adicionales quedan, sin embargo, marginados de modificaciones importantes en este mismo sentido, el primero tiene que ver con la poca significativa reducción del financiamiento público. Si bien es cierto que hay una importante reducción del financiamiento privado en las campañas electorales, que se han disminuido los tiempos de campaña y regulado las precampañas, lo cierto es que seguiremos destinando un alto presupuesto público para los partidos políticos, tanto en su vida ordinaria, como en las contiendas.

La reducción con la nueva fórmula constitucionalizada de determinar el presupuesto público a los partido políticos, sin considerar gastos especiales sino simplemente dos componentes de éste, esto es, financiamiento ordinario y de campaña, respecto de la fórmula actual de calcular el financiamiento público en estos dos rubros, generará un ahorro de apenas el 11 por ciento en el periodo 2008-2018 tomando como base las proyecciones más conservadoras, lo cual está lejos de satisfacer uno de los reclamos mas claros de la sociedad en su conjunto.

Otra dimensión relativa al tema dinero/elecciones, que constituye el retroceso más importante en esta materia, es la creación de un órgano técnico con autonomía de gestión al interior del IFE, que si bien plantea la eliminación del secreto bancario, fiscal y fiduciario para los procesos de fiscalización de los recursos otorgados a partidos políticos, transforma un órgano colegiado, con la presencia del órgano ciudadanizado del Consejo General -como es la Comisión de Fiscalización-, para volverle un órgano unipersonal y sin la presencia en la conducción de las investigaciones y del procedimiento de representantes del máximo órgano de dirección del IFE, que queda ciertamente como el órgano resolutor, pero que ya no forma parte procesal de la fiscalización. Esta es quizá, junto con la elevación a rango constitucional de que las autoridades electorales sólo podrán intervenir en la vida de los partidos en aquello que señalen expresamente las leyes, el elemento que provoca una de las mayores preocupaciones de la reforma, toda vez que favorece la opacidad en torno a los partidos políticos, ya que abre la puerta a posibles actos de impunidad en su vida interna, particularmente entre la militancia y la dirigencia.

El nuevo diseño institucional

El primer gran dilema que se formuló desde la perspectiva ciudadana en torno al IFE, y me refiero a la propuesta del Comité Conciudadano para la Reforma Electoral, fue plantear un nuevo diseño institucional a partir de la transformación de un órgano federal en un órgano nacional que se encargase de la organización de procesos electorales locales y federales. Las razones para rediseñar en estos términos la autoridad administrativa electoral estaban ligadas a reducir el costo de las burocracias electorales, dar integralidad al proceso de fiscalización, pero, particularmente, lograr que los poderes formales y fácticos en los estados de la República, no secuestrasen la independencia y autonomía de las autoridades electorales como lamentablemente ocurre en muchas entidades. La reforma plantea como posibilidad expresa el que el IFE se encargue, a petición de las autoridades en los estados, de organizar las elecciones; en este sentido existe sin duda un avance, pero no de la magnitud que requiere el sistema electoral mexicano.

La elección escalonada del máximo órgano de dirección del IFE constituye, a juicio de casi todos, un avance importante junto con la ampliación de un periodo de nueve años del mandato constitucional para ser consejero electoral. En los hechos, la salida de los actuales consejeros electorales se volvió uno de los aspectos más complejos a negociar entre las fuerzas políticas, particularmente por el discurso público asumido por el consejero presidente del IFE, Luis Carlos Ugalde, que con el apoyo de algunos medios electrónicos logró posicionar la idea de que su salida representaba un golpe para la autonomía del Instituto, lo que constituye desde mi perspectiva un falso debate. Sin duda, la necesidad y la crisis política que México ha experimentado en materia electoral exceden con creces la relevancia de la permanencia o no, los aciertos o no, del consejero presidente del IFE, no abundo por ello en un debate que considero insustancial y en algún grado absurdo; sólo dejo dicho, en torno a lo expresado por otros analistas, que esta determinación no "ensombrece" la reforma.

Lo verdaderamente importante en este sentido, y que es condición para considerar un avance la reforma electoral, es la modificación del procedimiento por el cual se eligen a los consejeros electorales del consejo general. Si este procedimiento no se modifica para volverse público, transparente, con la intervención de organismos civiles, ciudadanos e instituciones académicas; si no se incorporan elementos como la entrevista y la comparecencia pública de quienes aspiren a este cargo, mantenemos el riesgo de que la conformación del máximo órgano de dirección del IFE se partidice, o que por lo menos se ponga en entredicho, por buenas razones, su independencia. Si este procedimiento no se hace de cara a la sociedad, mantendremos los riesgos y la tentación de controlar el instituto por esta vía. La reforma habla de una amplia consulta a la sociedad en torno al nombramiento de los consejeros como la única modificación procedimental, pero deja sólo a los grupos parlamentarios la facultad de proponer consejeros. Es fundamental normar en la legislación secundaria esa amplia consulta, combatiendo la tentación de hacer un procedimiento simulado.

Otro aspecto de la reforma que considero un retroceso es la creación de una contraloría en el IFE, nombrada desde la Cámara de Diputados a propuesta de instituciones académicas. A pesar de que se matizó la propuesta original, que otorgaba a la Cámara plena ascendencia sobre dicha contraloría, ésta podría ser usada, eventualmente, como un medio de control político sobre la autoridad electoral.

El IFE, que es por cierto una de las instituciones mas fiscalizadas, debe sin duda ofrecer mecanismos para la rendición de cuentas y los consejeros, como servidores públicos, no pueden ni deben estar exentos de evaluación y supervisión, sobre todo cuando al interior del instituto se experimenta una gran cantidad de desigualdades presupuestales, salariales y de infraestructura, deficiencias que a mi juicio pueden ser atendidas con modelos alternativos que no abran la puerta a la manipulación de sus determinaciones.

Si se concreta la contraloría del IFE nombrada por la Cámara, los demás órganos autónomos del país deberán ser homologados, es el caso de las universidades autónomas, los organismos no jurisdiccionales en materia de derechos humanos y otros.

Consideraciones finales

La reforma sigue viva y en medio de un muy importante e inédito debate, porque trastoca no sólo ya la vida institucional y la de los partidos, como en reformas anteriores, sino diversos ámbitos de la vida social y económica en México, porque pone el acento en ámbitos "prohibidos" en la discusión pública, como son la radio y la televisión.

Se trata, en todo caso, del primer andamiaje para la reforma, de la que falta ver, saber y desarrollar aún muchos elementos. El decreto original fue mejorándose sistemáticamente en la medida en que se discutió en el espacio público; el horizonte de la reforma parece ahora reconocer su agenda en la estructura específica en donde habrá de tomar vida el espíritu del planteamiento constitucional.

Tenemos razones para pensar que estas modificaciones constitucionales impulsan el cambio no sólo del modelo electoral, sino en buena medida, cambios futuros en el sistema de partidos; estamos así frente al principio de diversos cambios, por ello también frente al fin de muchas prácticas y condiciones políticas en México

En las semanas venideras veremos a las tres fuerzas mayoritarias debatiendo con los partidos políticos emergentes, quienes encuentran que la reforma pone en entredicho su propia existencia; en este marco habrá de discutirse también el tema de las candidaturas independientes, aspecto que la reforma ha marginado, constituyéndose en una de las asignaturas pendientes.

La reforma electoral enfrentará el embate desmedido de la radio y la televisión, industrias que harán uso de todos sus recursos y aliados para facturarle al Poder Legislativo, e incluso al Estado mismo, no sólo la pérdida que habrá de suponer la no compra de publicidad electoral y la relativa a los gobiernos locales y municipales para promover la imagen pública de los gobernantes, sino a su vez, la pérdida del poder político que de facto ejercían frente a partidos y gobernantes. Esto, para decirlo claro, apenas empieza.

Aún con sus defectos, esta reforma ofrece hasta ahora avances que no podemos desdeñar, empezando por el debate mismo. Falta entrar al tema de justicia electoral, que incluye no sólo al Tribunal sino a la Fepade, y abrir con fuerza la discusión de los medios de comunicación y todo lo que ello implica. Espero que los legisladores entiendan que sin una ciudadanización no simulada, serán incapaces de enfrentar sus muchas oposiciones, incluidas desde luego las que están bajo su propia piel. Espero que sean capaces de incorporar en esta reforma el peso de la historia.

Nosotros mientras tanto seguiremos utilizando la única arma que tenemos: la persuasión.

El autor es miembro del Comité Conciudadano para la Reforma Electoral

.Publicado en Enfoque de Reforma el 16 de septiembre de 2007.